Títulos en la pared.
Nuestro sistema educativo se basa en la idea de la
capacidad académica. Y hay una razón. Antes del siglo 19 no había sistemas públicos de educación, en
realidad, todos ellos llegaron a satisfacer las necesidades de la
industrialización. Así que la misma tiene sus raíces en la siguiente
idea. La capacidad académica, lo que realmente ha
llegado a dominar nuestra visión de la inteligencia, porque
las universidades diseñaron el sistema a su imagen. Si se piensa en ello, todo el sistema de la educación en todo el mundo es un proceso prolongado de acceso a la universidad. Y la consecuencia es que muchos, de gran talento,
las personas creativas brillantes piensan que no lo son. La misma fue creada
para llenar y cumplir un esquema de trabajo donde el “profesional” no es
valorado en su justa dimensión, así sea un excelente profesional o un llamado “profesional
mediocre” lo cual llena de gran frustración a miles de jóvenes, quienes
invierten tiempo y dinero en carreras la cual no serán valoradas por el
empresario.
En los próximos 30
años, según la UNESCO, más personas de todo el mundo se graduarán a través de la educación que desde el comienzo de
la historia. Más personas, y es la combinación de la tecnología y su efecto de transformación en el
trabajo, y la demografía y la enorme explosión en la población. De repente, los grados no valen nada. ¿No es
cierto? En el pasado reciente, si
tenías un título, tenías un trabajo. Si no tenías un trabajo es porque no quieres. Pero
ahora los jóvenes con títulos de profesionales, a menudo se dirigen a casa para seguir jugando juegos de
video, ya que es necesaria una maestría en donde el
trabajo anterior requería una licenciatura, y ahora se necesita un doctorado para el que requería
una maestría. Es un proceso de inflación académica. Y esto nos indica que toda la estructura de la educación está cambiando bajo nuestros pies. Tenemos
que repensar radicalmente nuestra visión de la inteligencia.
De manera muy personal entiendo que la esclavitud no ha
sido erradicada del planeta, más bien ha tomado otra forma, la de las 8 horas
diarias de trabajo, donde se educa desde niños a vivir en la esclavitud
permanente de tener un buen “empleo” donde le dedicas gran parte de tu vida y
donde eres solamente un número, que cuando no rindes no vales y eres despedido,
lo cual me lleva a una gran reflexión, ¿Vale la pena hacer esa inversión de
tiempo y dinero? ¿Vale la pena pasar todos esos años de estudios y de inversión
en tiempo y dinero para tener un “buen empleo”? ¿Vale la pena invertir tanto
para tener un título en la pared?
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